San Juan en la playa de Fuengirola: guía para disfrutar la fiesta al máximo

La noche de San Juan no es una noche cualquiera en Fuengirola. Es una de las fechas más esperadas del año, donde miles de personas —locales, turistas, jóvenes y familias— se reúnen en la playa para celebrar la llegada del verano con fuego, música y fiesta hasta el amanecer.

Esta celebración, que tiene raíces paganas y connotaciones mágicas, se vive aquí con intensidad. Desde los primeros rayos de la tarde del 23 de junio, las playas empiezan a llenarse de gente armando sus hogueras, colocando mesas, neveras y altavoces. Y cuando cae el sol… empieza la verdadera fiesta.

Ambiente y Público

La Noche de San Juan en Fuengirola es una mezcla vibrante de generaciones y culturas. En la playa te encontrarás desde familias haciendo barbacoas hasta grupos de amigos bailando descalzos sobre la arena.

Los puntos más concurridos suelen ser las playas de Los Boliches, San Francisco y El Castillo. Allí, el ambiente es totalmente festivo, pero con espacios para todos los gustos: zonas tranquilas para disfrutar con niños, áreas con DJs improvisados y hasta grupos con tambores y fuegos artificiales.

A partir de las 22:00 el ambiente se vuelve más juvenil, con mucha presencia de jóvenes locales y turistas que vienen preparados para una noche larga. Muchos grupos de escandinavos y británicos se mezclan con andaluces que no perdonan esta cita. No hay etiquetas: lo importante es celebrar, brindar y saltar la hoguera.

Música y Rituales

Aunque no hay una discoteca oficial en la arena, la música nunca falta. Es habitual ver pequeños grupos con altavoces portátiles pinchando reguetón, pop español, electrónica o incluso flamenco, creando diferentes «zonas musicales» según avanzas por la orilla.

Además, San Juan no sería lo mismo sin sus rituales. A medianoche, miles de personas se acercan al agua para mojarse los pies (dicen que da suerte) y muchos aprovechan para pedir deseos. Otros saltan las pequeñas hogueras encendidas en la arena —con cuidado, eso sí— para espantar lo malo y atraer lo bueno.

Si nunca lo has hecho, lleva tu papel con un deseo escrito y quémalo en el fuego. No es obligatorio… pero todos lo hacen.

Bebidas y Comida

Una de las claves para disfrutar al máximo la noche de San Juan es llevar provisiones. Las tiendas cercanas suelen estar llenas desde el mediodía, y encontrar hielo después de las 19:00 puede ser misión imposible.

Lo habitual es montar una nevera con bebidas (cerveza, tinto de verano, refrescos y algún combinado), y llevar algo de picoteo. Las barbacoas están permitidas en ciertas zonas, pero conviene consultar con antelación si hay restricciones ese año. Muchas familias y grupos optan por llevar tortillas, bocadillos, embutidos o snacks fáciles.

Eso sí, recuerda: todo lo que traigas… llévatelo. El Ayuntamiento refuerza la limpieza esa noche, pero el civismo hace la diferencia.

Consejos Prácticos

• Llega temprano: A partir de las 20:00 encontrar buen sitio es difícil, especialmente si vas en grupo.
• No olvides la ropa de abrigo ligera: Aunque sea verano, junto al mar refresca pasada la medianoche.
• Zapatos cómodos o descalzo: La arena puede estar caliente al principio… pero luego es parte del encanto.
• Lleva bolsas de basura para recoger todo al terminar.
• Evita el coche: Aparcar cerca de la playa es casi imposible esa noche. Mejor ir andando, en bus o en taxi.
• Respeta el entorno: Las hogueras deben ser pequeñas y siempre controladas. No uses materiales contaminantes.

Horarios y Normativa

Aunque la fiesta empieza por la tarde, el punto álgido es entre las 23:00 y las 02:00 de la madrugada. Las playas suelen estar abiertas hasta las 03:00 o 04:00, dependiendo del año y la normativa municipal.

El Ayuntamiento de Fuengirola suele publicar unas normas específicas días antes: zonas habilitadas, prohibiciones y recomendaciones. Conviene consultarlas en la web oficial o redes sociales municipales.

Conclusión

San Juan en la playa de Fuengirola es una experiencia única que hay que vivir al menos una vez. Fuego, música, arena, mar y una energía que solo se da esa noche mágica. Si vienes preparado, con buena compañía y ganas de pasarlo bien, tendrás recuerdos que te acompañarán todo el verano… o toda la vida.